¿Si se viera obligado a comprar un portafolio en este momento, que compraría? Esta pregunta introductoria reveló el apetito de la audiencia  y fue respaldada por los panelistas quienes concuerdan con que el sector industrial es aquel que sobresale con un 55% de los votos, seguido por la industria multifamiliar con un 24%, el sector hotelero con 14%, retail 5% y un sorprendente 2% para el nicho corporativo. David O’Donnell revela que México tiene la gran ventaja de ser 20% más barato door-to-door que China para exportaciones a Estados Unidos. Por otro lado Jaime Fasja comenta que los espacios corporativos van a modificar sus formas de uso. Explica que es fundamental que aquellos desarrolladores inmobiliarias moderen sus planes de expansión para replantear su producto y así ofrecer un mayor número de servicios, mayor flexibilidad y sobre todo adaptabilidad al nuevo esquema laboral deribado del home office y flex spaces.

Pepe Shabot comentó que toda empresa debe de recalcular de forma continua el business plan de la firma debido al alto nivel de incertidumbre existente, teniendo en consideración la dinámica de demanda al esperar niveles de desempleo de entre 11% y 12%, el entendimiento de la dinámica de inflación de costos y sobre todo la mitigación de riesgos buscando TIRS de 23% a 25% y 500 puntos base por encima a lo buscado en el pasado. Al igual que otros miembros del panel, cree que existe una gran oportunidad para los multifamily bien diseñados, bien ejecutados y que ofrezcan mejores niveles de servicio que el mercado de renta informal.

Adicionalmente a confirmar que el sector hotelero ha tenido uno de los peores desempeños históricos en lo que va del año, Federico Martin del Campo, quién actualmente funge como Chair de ULI México, cree que el nivel de inversión en México disminuirá especialmente aquel que funge en dólares pero existirán oportunidades de compra siempre y cuando se cuiden los niveles de liquidez. Otra industria que ha sufrido de forma pronunciada el impacto de la pandemia es el sector retail, el cúal fortalecerá la evolución que ya había iniciado hace alrededor de 12 años con un enfoque orientado hacia el consumidor. Aquellos que participen en el desarrollo de estos complejos deben de orientar su negocio hacia un desarrollo de experiencias rediseñando espacios y balanceando el customer experience interaction junto con la distribución de inventarios a través de baratas.

A pesar de la complejidad de la situación, se cree que el sector de bienes raíces tendrá una recuperación lenta pero continua. La división de opiniones entre una recuperación en forma de W y U fue notoria pero coinciden en que siguen existiendo argumentos por apostarle al sector siempre y cuando se respeten los planteamientos explicados a través de la conferencia y se realicen los ajustes que sean necesarios para cada negocio en específico. Como siempre lo ha sido, la industria inmobiliaria y de bienes raíces es y siempre será, un sector que influye de manera importante en la vida de cada uno de nosotros. Construyamos sinergias a futuro para fortalecer al país fomentando el buen uso de la tierra.